Por Dayana Rashon Una de las plagas más perjudiciales que afectan los árboles de pino son los llamados comunmente “gorgojos” (del género Dendroctonus), estos insectos miden alrededor de dos a siete milímetros, varía de tamaño según la especie. Son de color café o negro. Afectando bosques y plantaciones de pino desde el sur de Estados Unidos hasta el norte de Nicaragua.
En Guatemala se han registrado 7 especies de gorgojos, estos se encuentran en los bosques y plantaciones de pino del país; ubicados en Poptún, Petén, en el Oriente, las Verapaces, y todo el Occidente del país. Algunas especies son consideradas más agresivas que otras, por la cantidad de individuos y generaciones que pueden tener en un corto tiempo.
Los insectos ingresan a los árboles penetrando por las grietas de la corteza, donde pasan la mayor parte de su vida, alimentándose y procreándose. La corteza les provee de refugio y protección contra sus enemigos naturales, plaguicidas y condiciones adversas, por esta razón el método más eficiente y rápido para detener el avance de plaga es derribar inmediatamente el árbol. Esto afecta el medio ambiente ya que se tiene que descortezar o quemando los árboles lo cuál disminuye la proliferación de la plaga.
Los gorgojos colonizan en grandes grupos, tratando de vencer las defensas del árbol, por su parte el árbol libera resina o trementina como mecanismo de defensa, que puede “ahogar y/o atrapar” a los insectos.
Si los árboles se encuentran fuertes y resistentes ganan la batalla, pero si están débiles y estresados, la pierden.
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